4 octubre, 2024

Denuncian que algunos estudiantes de la Universidad Americana tienen embolatado el grado, porque el ex jefe de financiamiento les robó la plata de las matrículas

Darwin De la Hoz Beltrán, ex jefe de financiamiento de la Institución Universitaria Americana

Con el grado embolatado. Así están varios estudiantes de la Institución Universitaria Americana de Barranquilla, luego de que cancelaran varios semestres directamente a las cuentas del entonces jefe de financiamiento del alma máter, Darwin Alfredo De la Hoz Beltrán, y este terminara ‘tumbándose’ el dinero y saliendo repentinamente de la universidad.

Uno de los perjudicados de esta situación es Joxel Rodríguez Cantillo, estudiante de Derecho, quien actualmente realiza la judicatura en un juzgado de familia del circuito de Barranquilla y tenía programado graduarse en marzo de 2025.

Pero sus planes se estarían viendo truncados, porque la Universidad Americana le está exigiendo que cancele la plata que le pagó al ex jefe de financiamiento, es decir, el valor del 60% de sus últimos tres semestres –tenía un beneficio de 40% de beca por sus buenas calificaciones en el colegio–, lo cual equivale a 7 millones 500 mil pesos ($2.500.000 por semestre).

Joxel confió en la buena fe del jefe de finanzas de la universidad; primero, por el simple cargo que ostentaba. Segundo, porque él iba a las aulas de clases proponiendo algunos descuentos para los estudiantes y era algo que hacía públicamente.

Y tercero, porque, además de la credibilidad que le daba su investidura, lo reconocía como un hombre consagrado a la palabra de Dios, que asistía junto a su hermano a una iglesia evangélica en el barrio Costa Hermosa, de Soledad, y lo último que pensó es que resultara siendo un estafador.

La Corporación Universitaria Americana retiró a Darwin De la Hoz de su cargo el 25 de noviembre del año pasado y varios días después lo informó en un comunicado, haciendo la salvedad de que cualquier solicitud o trámite con el área de financiamiento debía hacerse a través del correo institucional y de la línea de WhatsApp de la institución. Pero ya lo hecho, hecho estaba.

Lo peor de todo es que así como Joxel hay decenas de estudiantes más en la misma situación, con sus ceremonias de grado en veremos y con la universidad detrás exigiéndoles la suma de dinero que cada uno de ellos le pagó al señor De la Hoz, que –dicho sea de paso– bloqueó a Raymundo y todo el mundo de WhatsApp y demás redes sociales, y nadie sabe de su paradero.

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