¿Homicidio o suicidio?: instructora de yoga pierde la vida en extrañas circunstancias en su apartamento en Villa Campestre
Álvaro Rivera y Valentina Cepeda
Una instructora de yoga y licenciada en Educación Infantil, identificada como Valentina Cepeda Rodríguez, de 22 años, perdió la vida en extrañas circunstancias, que hoy son materia de investigación por parte de las autoridades.
El suceso que desencadenó en la muerte de Valentina ocurrió en la carrera 26 No. 3A-272, Torres de Villa Campestre, en jurisdicción de Puerto Colombia.
El relato con el que inicialmente han contado los investigadores de la Sijín Metropolitana de Barranquilla, es el de Álvaro Felipe Rivera Ramírez, su pareja sentimental.
En su testimonio inició diciendo que Valentina este martes se levantó deprimida diciendo que se iba a suicidar. Pero él no le prestó atención, porque ella llevaba diciendo eso toda la semana.
Posteriormente manifestó que se iba a tomar una pastilla de Clonazepam y ante su insistencia, él decidió llamar una ambulancia.
En ese instante -todo esto dicho por Álvaro Felipe en su declaración-, se trenzaron en una discusión y al poco tiempo ella ingresó a una habitación donde tienen unos elementos de yoga.
Álvaro no precisa el tiempo que transcurrió, pero aseguró que a las 9:00 de la mañana aproximadamente se asomó a dicha habitación y encontró a su mujer arrodillada, con el juego de columpio de yoga aéreo -que es como una pequeña hamaca-, atada alrededor del cuello.
Relata que le tomó una foto porque pensó que “estaba molestando”, pero al acercarse y darse cuenta que no respiraba, la soltó y comenzó a darle respiración boca a boca.
Luego llamó a la patrulla del cuadrante y estos lo habrían ayudado a trasladar a Valentina a la Clínica Portoazul. Allí permaneció en UCI durante algunas horas, hasta que en la mañana de este miércoles se produjo su deceso.
EL RELATO DEL PADRE
Antes de que se produjera la muerte de Valentina, su padre, identificado como Deivid Cepeda Mejía, había acudido la tarde de este martes a la URI de la Fiscalía para denunciar a su yerno por tentativa de homicidio, en el contexto de feminicidio.
El señor Deivid, dentro de su extenso argumento, habría manifestado que su hija había sido víctima de maltrato verbal y físico por parte de su marido y que este sería el responsable de su muerte.
